Un herbicida garantiza un riesgo mínimo para la agricultura. Además, usado correctamente, es muy importante para el manejo de melazas.
Algunos tipos de herbicidas se aplican sobre el cultivo o en el suelo que crecen. También, suelen estar presente en parte del cultivo cosechado y ser consumido por medio de productos animales.
Los residuos del herbicida se determinan por medio de estudios relacionados de la alimentación animal. Es usado para conocer una ingestión diaria aceptable o el nivel en que no se observa efecto. Luego, se logra establecer restricciones sobre qué cultivos tratar y en qué intervalos.
Estos herbicidas son vulnerables a la descomposición en plantas, animales y microbios. Los problemas de residuos no son comunes, si los herbicidas se usan de acuerdo a las instrucciones del fabricante.
¿Qué es un herbicida?
Un herbicida es un producto químico, es usado para interrumpir que plantas indeseadas se desarrollen. Estas plantas se conocen como malas hierbas y se observan en terrenos que son o serán cultivados.
Las malas hierbas crecen y se desarrollan en zonas no deseadas por el hombre. Estas cuentan con las mismas características; tienen facilidad de dispersión por viento o arrastre por agua y tienen gran resistencia por el alto producción de semillas.
La maleza, como también es conocida, genera la reducción de la cosecha, causada por el uso de espacio, agua y luz. De igual manera, se afecta la recolección o ralentiza la recogida. También, aumento los costes porque al no tratarse a tiempo se debe combatir la necrosis.
Un herbicida se elige de acuerdo al estado del cultivo y tipo de maleza a controlar, al igual que las características físicas del suelo.
Nomenclatura de los herbicidas
En el mercado, los herbicidas se encuentran en formulaciones sólidas o líquidas. Esto dependerá de los ingredientes activos y la forma de aplicarlo.
En este sentido, los herbicidas cuentan con nomenclatura. Por ejemplo, el nombre químico, describe la composición química. El nombre común, es el nombre genérico de acuerdo al ingrediente activo y el nombre comercial.
De igual manera, la formulación está indicada en la etiqueta del producto y está asignado por una o más letras luego del nombre comercial. También, está señalado la cantidad de ingrediente activo en % y en gramos.
¿Cuáles son los tipos de herbicidas?
Existen varias formas de clasificar los herbicidas, incluyendo cómo se usan, sus propiedades químicas y su modo de acción. Estos se dividen en función de la cantidad y el tipo de mala hierba a combatir.
Herbicida total
Es un producto fitosanitario que es aplicado con el objetivo de controlar el total de las malas hierbas que hay, sin exclusión. También, se usan para limpiar terrenos y controlar totalmente las especies de malezas perennes y anuales.
Herbicida selectivo
Es usado para eliminar un tipo específico de maleza, pero se conserva el resto del cultivo. Estos se aplican en maleza de hoja ancha durante la primavera y el otoño. Es importante repetirlo de 2 a 3 veces.
Para distinguir ambos tipos, dependerá de la concentración y uso, puesto que un herbicida total se convierte en selectivo cuando se usa en bajas concentraciones y un selectivo con dosis altas elimina a cualquier planta.
Herbicida residual
Es aquel producto empleado para la eliminación de malas hierbas en el pie de los árboles. No son usados con frecuencia en jardinería, ya que se centra en la fruticultura, especialmente se aplica en el olivar.
Se debe aplicar sobre el suelo, creando una membrana que, al traspasar las malas hierbas, les causa la muerte. Solo afectan a las que están por germinar y no las que existen.
El efecto en el suelo dura semanas o meses, luego de un mes y medio se repite la aplicación. Por lo general, no son activos en una especie perenne o en las que nacen de semillas.
Herbicida foliar
También conocido como herbicida de follaje o de hoja, se clasifica en herbicida foliar sistémico y foliar de contacto.
El primero, se aplica en las hojas y tallas, estos son absorbidos y la savia traslada a la raíz hasta que muera totalmente. El segundo, se concentra en destruir hojas y tallos y se aplica sobre ellos sin afectar la raíz.
En estos de herbicidas se usa el término translocación. Esto define que un herbicida se transloca a zonas por medio de la planta en cuanto los sistémicos no sucede, pero si en los foliares. La translocación sucede por medio del floema, es un tejido conductor que transporta nutrientes orgánicos e inorgánicos.
Tipos de herbicidas según aplicación
Se presentan las características de los siguientes herbicidas:
Herbicida presiembra
Es un producto aplicado sobre el suelo desnudo. Es perfecto cuando la siembra es directa en rastrojo y es esencial eliminar la maleza antes de sembrar algún tipo de cereal como soja, cebada o centeno.
En promedio, un mes antes de iniciar la siembre, dependerá del producto a usar y el tipo de suelo. Los herbicidas se detallan de acuerdo a la marca, plaga, cultivos autorizados e ingrediente activo.
Herbicida preemergencia
Se usa antes de la emergencia de la maleza, no coincide con la emergencia de cultivo, aunque esté sembrado.
Se recomienda si en la parcela ha existido casos de malas hierbas. Hay que tener en cuenta el estado del terreno, puesto si es aplicado en sequía extendida, su eficacia se verá reducida. Los resultados son en riego o secano de carácter húmedo.
Herbicida post emergencia
Se aplica luego de la emergencia una mala hierba. Está dirigida para controlar cuando se encuentran en estado de plántula algo desarrollada, que ha escapado luego de aplicar presiembra o preemergencia.
Su acción es foliar, por contacto o sistémicos y con acción residual. También, existen herbicidas post emergencia precoz.
De igual manera, hay herbicidas que aplican de acuerdo al terreno, el clima, el cultivo y otros factores. Por ejemplo, como glifosato o atrazina.
Los herbicidas actúan diferentes, hay casos donde regulan el crecimiento anulando la división celular, en otros, la fotosíntesis u otros mecanismos de las mismas especies vegetales.
¿Cómo usar los herbicidas?
Hay herbicidas que son productos químicos, para ellos hay que tener cierto cuidado al usarlos y almacenarlos.
Principalmente, hay que leer y seguir las indicaciones del fabricante, para prestar atención a la composición y aplicación. También, se respeta las dosis reseñadas en la información. De igual manera, se tiene en cuento la duración que permanece activos, así como la filtración en aguas subterráneas.
La formulación de los herbicidas
Los herbicidas se formulan de manera pura, esto se conoce como herbicida de grato técnico. Suele ser líquido o sólido, y pocas veces se usa en el campo.
En cuanto el herbicida para avena silvestre se emplea el sulfato de metilo tiene solubilidad en agua 765g/1, pero la solución de difenzoquat no cuenta como herbicida si se añade un tensoactivo o surfactante no-ióico a la solución.
El tensoactivo facilita al herbicida en retener y penetrar, para incorporarse en un producto comercial, como un concentrado soluble.
También se formulan ingredientes solubles en agua en granulados que se dispersan en agua, tienen sólidos molidos que se combinan con agentes de suspensión. Se utilizan directo en el tanque de la asperjadora para verterlo.
Un compuesto de baja solubilidad, tiene un ingrediente activo que se logra moler hasta dejarlo en polvo. Se mezcla con poca cantidad de agua hasta formar una pasta, antes de colocarlo en la asperjadora.
Los ingredientes activos insolubles en el agua, su aplicación es foliar, se disuelve en un solvente orgánico, como el xileno, para mezclarlo con tensoactivos hasta formar un concentrado emulsionado.
Hay herbicidas que funcionan como inhibidor como glifosinato y bialafos. Es un aminoácido de poca toxicidad para los mamíferos. Además, es ideal para el cultivo de colza.
Hay una enzima microbiana que es responsable de degradar compuestos del uso continuo de algunos plaguicidas. Los tiolcarbamatos ayudan a incrementar los organismos degradantes en herbicidas, además algunos las melazas toleran el metabolismo.
¿Cómo prevenir y manejar la resistencia a herbicidas?
A continuación, conocer cómo prevenir los casos de resistencia a herbicidas:
Uso de rotación de cultivos
Es posible alternarlos, con cultivos de siembra de otoño con cultivos de primavera y verano, usar especies distintas. Esto último, brinda la oportunidad de utilizar herbicidas de distinto modo de acción y romper el aumento de plantas resistentes.
Técnicas culturales
- Siembras falsas, moviendo el terreno hará que la melaza germine y se pueda eliminar antes de la verdadera siembra.
- Trabajo profundo, es perfecto para eliminar melazas difíciles como el bromo.
- Segado, no se deja finalizar el ciclo vegetativo para conseguir que no se reproduzca por medio de la semilla.
- Modificar la fecha de la siembra, hay melazas que germinan en el momento donde no hay cultivo y es difícil eliminarla. De esta manera, se disminuye el banco de semillas del suelo, obteniendo como resultado reducir el problema en esa siembra y las que vienen.
Alternar, limitar y mezclar herbicidas
- Al no aplicar continuamente el mismo producto o de la misma composición química, pues el modo de actuación es igual y no se evita la aparición de resistencias.
- Limitar la cantidad de aplicaciones en el mismo tiempo. Debido a que al aplicarlo varias veces en una misma campaña, la resistencia aparecerá pronto. Esto se debe a que la mala hierba alcanzará una variación genética para defenderse.
- Mezclar herbicidas con diferente modo de acción, pero sean efectivos contra las malas hierbas. Es una forma de atacar por dos lados, es más difícil crear resistencias.
- Aplicación, el tamaño de la melaza de ser igual en la etiqueta para un control adecuado.
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